Consejos para mantener las toallas como nuevas

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Si quieres que tus toallas de playa y de baño se vean como nuevas, debes seguir una serie de consejos para su mantenimiento. Vamos a empezar con los consejos relacionados con la frecuencia de su lavado.

Si estamos hablando de una toalla de playa, lo recomendable es lavarla cada vez que se utiliza. No importa si se ha llevado a la piscina o al mar, porque en cualquiera de los dos casos traerá sustancias que no beneficiarán a la toalla, es decir, salitre en el caso del mar y cloro en el caso de la piscina.

Como la toalla no va a estar sucia es suficiente con darle un lavado muy corto, incluso solo con agua, para aclararla y secarla. Dado que la mayoría de las toallas de playa hoy en día son de microfibra, secará muy rápido y estará lista para usarse al día siguiente.

En el caso de las toallas de baño, no hay que lavarlas a diario, de esta manera solo estaríamos contribuyendo a gastarlas antes de tiempo, pero tampoco debemos dejarlas húmedas muchos días. Si las utilizamos para secar el cuerpo o las manos podemos utilizarlas varias veces, se recomienda que entre tres y cuatro días. Sin embargo, si son para secar el pelo y quedan excesivamente mojadas, entonces lo preferible es lavarlas tras su uso, porque podrían coger olor a humedad y es muy difícil de eliminar.

Algo que influye en la frecuencia con la que cambiaremos la toalla es el nivel de humedad del cuarto de baño. Si el baño es muy húmedo y frío tal vez las toallas se empapen más con la humedad ambiental y necesiten cambiarse con más frecuencia, mientras que si es un cuarto de baño seco, con calefacción o en verano, podrían aguantar incluso toda la semana ya que se secarían de manera casi inmediata tras el uso.

Prepara un detergente casero muy efectivo

Uno de los problemas de las toallas es que, cuando las lavamos solemos ponerles mucho suavizante para que queden más mullidas. Pero los restos del producto quedan entre las fibras de la toalla y esto puede causar que dejen de absorber el agua correctamente, es decir, no sequen bien.

Por otro lado, ciertos detergentes también pueden acumular restos entre las fibras de las toallas y por eso, cada cierto tiempo, es buena idea darles a las toallas un lavado con un detergente casero que ayudará a que recuperen todas sus propiedades.

Si estás pensando que no tienes tiempo para elaborar tu detergente, no te preocupes porque realmente no hay nada que elaborar. Solo necesitas una taza de vinagre blanco de limpieza y media taza de bicarbonato sódico.

Para empezar, dales a las toallas un prelavado solo con agua para que se empapen bien. Cuando se inicie el lavado normal, añade en el sitio del detergente el vinagre de limpieza. Una vez que haya finalizado el programa de lavado, vuelve a reiniciar un lavado corto y esta vez, añade el bicarbonato. Deja que las toallas se laven de nuevo por completo y sécalas siguiendo las instrucciones que te vamos a dar a continuación. Verás como están mucho más esponjosas y vuelven a secar como al principio.

Para mantener estas propiedades deja de utilizar suavizantes para la ropa y en su lugar añade siempre un chorrito de vinagre de limpieza en la lavadora. Verás como se mantienen mullidas mucho más tiempo. Una vez al mes, haz lo que te acabamos de decir para darles una limpieza profunda y eliminar restos de detergente.

Secar las toallas correctamente

Tan importante como lavar bien las toallas es el secarlas correctamente. Para ello hay dos consejos básicos y muy importantes: pon a secar las toallas nada más acabar el programa de lavado de tu lavadora. Si no cuentas estar en casa, es mejor que no las laves ya que si quedan en la lavadora húmedas acabarán cogiendo olor más pronto que tarde y aunque sequen correctamente, no resultarán agradables.

El segundo consejo es no secarlas nunca al sol. Puede ser tentador porque en cuestión de una hora pueden estar secas todas las toallas, pero también estarán tiesas y ásperas. Seca tus toallas a la sombra y también evitarás que el sol pueda comerse los colores.

Las secadoras no solo están bien, son recomendables para secar las toallas, a no ser que el fabricante indique lo contrario, ya que las dejará mucho más esponjosas y mullidas. Procura no utilizar un programa que sea innecesariamente largo. Las toallas deben de quedar secas pero no tienen que estar más tiempo del que necesiten para eso.

Si usas la secadora no vas a necesitar planchar las toallas, saldrán mullidas, únicamente tendrás que doblarlas al instante para su uso. Si prefieres plancharlas, hazlo a una temperatura adecuada para evitar que se quemen.